El período entre los 9 y los 13 años es desafiante, tanto para los pre-adolescentes como las familias de los mismos; justo aquí ya no son niños ni son jóvenes, son apenas mentes adultas atrapadas en cuerpos pequeños. Durante la pre-adolescencia notamos cambios de apariencia, actitud y conducta, ya que sus cuerpos están experimentando el inicio de la pubertad, pero su capacidad de razonar aún no ha madurado. ¡Parece como si con el cambio de tamaño y de voz también estuvieran cambiando de personalidad! su auto estima luce frágil, notamos altas y bajas emocionales y su comportamiento fluctúa entre infantil y juvenil. Además de presentarnos éstos cambios típicos, la pre-adolescencia nos confronta con nuevos retos, algunos serios y difíciles.
HOGAR: ¿QUÉ SE HIZO MI NIÑO? En casa empiezan a redefinirse en relación con sus hermanos, padres y otros familiares. Empiezan a demostrar nuevos intereses. Resisten que se les trate como niños y piden más libertad y privilegios.
ESCUELA ¿ESTUDIOS SOCIALES O RECREOS SOCIALES? El ambiente de la escuela intermedia es estresante. Las materias escolares sean cada vez más duplicado, la motivación para los estudios pueden verse afectados por otros intereses. Muchos prefieren compartir con los amigos que aplicarse con las tareas, aunque luego sufran las consecuencias.
SOCIEDAD, ¡PELIGROS A LA VIDA! Los pre-adolescentes enfrentan fuertes presiones sociales, por parte de los compañeros, de influencia de sus vecindarios, y de los medios de comunicación. Cada vez más muchachos empiezan a experimentar con alcohol y drogas durante la pre-adolescencia, y un gran numero se inducia con pandillas juveniles antes de entrar a la secundaria. Una vez entendemos que nuestros muchachos enfrentan dificultades ¿cómo apoyarlos y ayudarlos a lidiar con los retos de la pre-adolescencia? Para ayudarlos a que se mantengan sano y seguros, es tema dispuesto a hablar con ellos sobre sus experiencias, emociones, opiniones y sobre temas delicados, como el sexo y las drogas. Al comunicarnos, evitamos ordenar, amenazar, rechazar, ignorar, predicar, cantaletear, interrogar, juzgar, criticar, culpar, atacar, avergonzar, humillar y ridiculizar. Recordemos que los muchachos aprenden de los adultos como enfrentar los retos, sobreponer los obstáculos y resolver los problemas que nos presenta la vida. Por lo tanto, es bueno encontrar buenos ejemplos. Ser pre-adolescente en estos tiempos y en el país no es nada fácil, así que demostrarles compresión, compasión y paciencia.
Durante los años de la pre-adolescencia es difícil saber cuando la intensidad emocional y las fluctuaciones en el animo son parte de los cambios mentales en la pubertad, a señales de asunto más sellos, tales como la depresión y los trastornos de ansiedad. Cuando la pre-adolescencia emprende el camino a convertirse en adolescentes es común que los padres pierdan el sueño pensando sobre todo lo que pudieran irles mal. El temperamento y el estilo de comunicación de pre-adolecentes influirían en cuan temprano se reconozcan los problemas. Los niños cautelosos o reservados pueden internalizar sus sentimientos en lugar de llorara, gritar, quejarse, etc.
Prestar atención a los cambios que atraviese, especialmente si afecta su rendimiento. Por ejemplo no es saludable que un pre-adolescente salga con sus amigos el fin de semana y no quede en casa compartiendo, por otro lado es igualmente es difícil tratar un niño que se quede todo el tiempo en casa viendo televisión o pegado al computador. Otro síntoma es si el niño que sacaba excelentes notas empieza de un momento a otro a perder asignaturas; también el cambio de peso, las nuevas raras amistades, problemas al dormir, dolores estomacales el dolor de cabeza o los altibajos emocionales repentinos.
LA ESCUELA Y EL PRE-ADOLESCENTE: Con la modernización y la globalización, la familia y la escuela, como agencias socializadoras sobre la vida del niño, se encuentran inmersas en una realidad de permanecer cambiando. Hay un conflicto de temporalidades que e evidencia en el desafiante discurso educativo y la realidad en la que se inserta el niño. La figura de la escuela sigue siendo la distribuidora de un conocimiento impuesto por otros modelos reflotados de nuestro pasado o provenientes de otros países en lugar de proceder a la construcción del conocimiento propio y actual.
en la preadolesncia a los adolesentes se le comiensan cambiar las neudronas.
ResponderEliminara los niños<comiensan a sentir cosas por la adolesentes y a las niña comiensan a sentir cosas por los adolesente y son de uno al otr